Mi mejor definición, por vosotros: Diferente, buena profesional, atenta, reservada, curiosa, habladora, cordero con piel de lobo, observadora, detallista, inteligente, amiga de sus amigos, perseverante, de impresión fría y distante, generosa, audaz, terca, temperamental, tierna y entrañable bajo una capa distante y fría, divertida, cabezona, quejica, especial, cariñosa, sensata, directa, sincera, con gran corazón, de apariencia seria, humilde, comprensiva, persistente, sabe escuchar, empática, paciente, cariñosa por momentos, fuerte por fuera y débil por dentro, buena consejera, responsable, agradable, sensible, con gracejo especial, consecuente, inquieta, alegre, expresiva, alguien que sabe escucharte, emotiva, entregada, cabal, culta, con la que siempre se puede contar.



lunes, 28 de febrero de 2011

Con una mirada...

Cuando alguien te falta, cuando alguien se va, que difícil es tener una palabra idónea, un comentario que sea el adecuado, un gesto que no delate nerviosismo y que haga que los que dependen de ti emocionalmente no caigan en una extraña situación. Pero yo como vosotras tres he pasado por este momento varias veces en un periodo de tiempo muy corto para mi, ni dos años, y hace poquito lo pasamos con otras amigas, por eso quiero que, con una mirada que os haya regalado hoy hayáis entendido que os apoyo, os comprendo, os quiero y me parece injusto lo que vivís en este momento, pero lo bonito es saber que ha tenido una larga vida para experimentar todo lo que esta vida le ha podido dar y no se la ha llevado en su juventud ni en ninguna etapa anterior, porque habría costado más. Aunque cuando estos caprichos de la vida te sorprenden a esta edad, la vuestra o la mía, parece que somos más conscientes de lo difícil y cuesta arriba que se hace la idea de vivir sin alguien a quien quieres.
Hay veces que sobran las palabras o que de tanto que os queremos animar al final acabemos atosigándoos...por eso yo sólo quiero daros mi ánimo, desde aquí, para una más cerca que para las otras dos, pero  igual de presta para las tres...porque sois mis amigas y no quiero veros sufrir...aunque sé que es inevitable...y sea yo o no el hombro que elijáis para mostrar cómo os sentís, aquí estaré cuando os haga falta...como lo habéis estado vosotras conmigo...y porque sois especiales...y a la gente especial se le cuida lo que haga falta y más...
Las injusticias de la vida nunca se creen merecidas, y los golpes hay que saber esquivarlos, quizás no asumiéndolo, porque es inevitable hacerte la pregunta ¿por qué?, por qué ella, por qué a nosotros, por qué nos la arrebatas, por qué no castigas a otros...por qué no nos has dejado disfrutarla aún más...y muchas otras que irán saliendo de vuestra rabia, del momento, del fuego que no aplacará ninguna palabra, sólo el tiempo. Os pido que convirtáis esa rabia en otro sentimiento y os hagáis fuertes ante este envite, que os ha demostrado que estáis unidas y siempre lo seguiréis estando, ante las adversidades y los buenos tiempos...
Y ahora sólo os mando un caluroso abrazo y un beso...poco más se puede hacer en estos casos...

viernes, 18 de febrero de 2011

Te he echado de menos...

Hay letras que parecen escritas para ti, y en este caso, me siento muy identificada con este trocito inédito de una canción de Pablo Alborán, Te he echado de menos...No sé, sea porque son días complicados, de muchos recuerdos, o por lo que sea...pero esta letra va dirigida a mi...lo presiento...

No quedas más que tú
no quedo más que yo
en este extraño salón
si nadie que nos diga
dónde, cómo y cuándo nos besamos
tenía ganas ya de pasar junto a ti
unos minutos soñando
sin un reloj que cuente
las caricias que te voy dando
juramento de sal y limón
prometimos querernos los dos
Te echado de menos
todo este tiempo
he pensado en tu sonrisa
y en tu forma de caminar
Te echado de menos
he soñado el momento
de verte al lado mio
dejándote llevar...
Quiero que siga así
tu alma pegada a mi
mientras nos quedamos quietos
dejando que la piel cumpla
poco a poco todos sus deseos
Hoy no hay nada que hacer
quedémonos aquí
contándonos secretos
diciéndonos bajito que lo nuestro
siempre se hará eterno
fantasía en una copa de alcohol
prometimos volver a vernos
Te echado de menos
todo este tiempo
he pensado en tu sonrisa
y en tu forma de caminar
he soñado el momento
de verte a mi lado dejándote llevar
Silencio...que mis dedos corren entre tus dedos
Y con un suave desliz hago que se pare el tiempo
Te he echado de menos
todo este tiempo
he pensado en tu sonrisa y
en tu forma de caminar
te he echado de menos
he soñado el momento
de verte al lado mio dejándote llevar
Yo te he echado de menos
yo te he echado de menos...

Un viaje con ida y vuelta..

Cuando tienes la oportunidad de sentarte frente al mar, ya sea por obligación, porque estás en periodo de espera, o por placer, te da por pensar, todo fluye con mejor armonía dentro de tu cabeza.
Y si ya te sientas ante el mar, pero el que te gusta, mejor. Eso me ha ocurrido esta mañana, que me he visto, casi sin quererlo o sin pensarlo, sentada frente al trocito de agua que une Cádiz y San Fernando...y llegan a mi cabeza muchos recuerdos y mucha gente que conoces, en ese lugar, la Tacita de Plata. Y te preguntas que estarán haciendo y si debes llamar, aunque es tontería porque no has llegado en un viaje de placer y tampoco vas a estar apenas tiempo en la ciudad en la que tanto te gusta estar...
Sí, es que creo que orienté mal mi ubicación al nacer, creo que por intentar precisar me quedé unos kilómetros antes, sin llegar a la cuna del Carnaval o a esa tierra con tanta historia y tanta solera, ésa tan caprichosa y que tanto me tira. Mi GPS interno creo que no estaba demasiado bien ajustado ese 21 de aquel mes, y me tocó "conformarme" con ver Cádiz de lejos, desde cualquier punto de la ciudad en la que vivo, pero al fin y al cabo, lejos.
Y te da por añorar no poder estar aquí toos los días, porque te gusta respirar su aire, tomar su sol y bañarte en sus aguas, perderte en sus calles en pleno casco antiguo o recorrer su amplio paseo marítimo, dejando atrás su Catedral, el teatro romano, el cementerio viejo y llegar a La Caleta, buscar el ficus del Mora, siempre rodeado de estudiantes de cualquier carrera y ver el sendero que lleva a su Castillo de San Sebastián.
De aquí no me querría marchar pero levantar la vista o escuchar un tono incómodo de algo que hay cercano (la ITV, jejeje), ver el cuaderno, la cámara y el bolígrao me devuelven a la realidad y me hacen ver la situación, que he venido por casualidad y que estoy en horario laboral, así que hay que continuar...
Pero también es entonces cuando vuelvo a envidiar a esa gente, mucha, que conozco aquí, porque me cambiaría por cualquiera de ellos con los ojos cerrados, aunque echara de menos los encantos de mi ciudad natal, pero confiesto que estoy enamorada de Cádiz, su gente, su ambiente, su arte, su Carnaval, sus  calles y todo lo que a ella concierne.
¡Ya volveré otro dia con más tiempo...!

miércoles, 16 de febrero de 2011

El sol!

Un día de lluvia provoca siempre amplios pensamientos, supongo que porque poco o nada hay que hacer. Y los días de lluvia han inspirado, en este blog, varias entradas, lo que corrobora mi teoria, que da para pensar. Y claro, hundes la nariz en la ventana, como si este gesto me ayudara a que el cielo descargara menos agua, y le das vueltas a la cabeza. Sinceramente, no siempre un día de lluvia es bueno, porque te hace acudir a cosas que no te apetecen recordar. Pero ahí están...Y quizás sientes añoranza por lo que pudo ser y no cuajó, y es que repetidas veces vienes a mi memoria, da igual quién seas, pero es inevitable que te me hagas presente y quiera recuperar lo que tuve, pero yo no lo perdí y yo no lo puedo recuperar, por lo tanto, no sirve de nada...
Y también doy vueltas y más vueltas a qué hacer, a sacar provecho a mis horas de asueto, que después llega el momento de trabajar y me arrepiento de lo que pude hacer. Pero con la lluvia pegando en el cristal es difícil pensar, sólo que aprietas los dientes esperando que desaparezcan las nubes, el agua, las tormentas y todo la oscuridad que traen, haciendo frío el día y desagrable, por qué no decirlo...
Es inevitable pensar en el solecito, en el que aparece algunos fines de semana y que confío en que se haga muy presente en unos pocos meses, el que calienta y que alegra los días..
Necesariamente yo, por el lugar en el que he nacido y por mi particular personalidad, necesito el sol, el calor y todo lo que él genera, es mi luz pero también mi energía...por eso deseo teletransportarme a meses próximos...

lunes, 14 de febrero de 2011

Un leve paso...entre el amor y el odio

Supongo que a todos nos pasa, en algún momento de nuestras vidas, en que esa línea delgada entre el amor y el odio hacia ciertas personas se hace aún más delgada de lo que es para todo el mundo...y en estos momentos experimento esa sensación más que nunca...
A salvo están todos los que, de una u otra forma, se sienten queridos por mi, pero esas personas que andan contigo en la ambigüedad, los que un día encajas en un sector de tu vida y otros en otro distinto por su comportamiento, esos son los que están provocando que esa delgada línea no deje de bailar, hasta que finalmente diga adiós a ese pequeño atisbo de empatía que hay y diga hola al pasotismo, al odio en alguno de sus estratos (puesto que odio es una palabra muy grande que confío en no tener que utilizar para definir nunca mi sentimiento hacia nadie).
Es una sensación extraña, porque confío en que, a pesar de mi carácter, o de mis prontos, tengo buenos sentimientos para con gente que no merece ni siquiera que se les mire a los ojos, y a pesar de todo y de mi buena intención, en el camino sólo encuentro desprecios que no merezco, por eso no tengo problema en tener claro que de todo se aprende y por eso en muchos casos voy a dejar que esa delgada línea entre uno y otro sentimiento, los expresados ahí arriba, se flanquee, para bien y para mal, pues muchas veces hasta que no se arriesga, no se sabe si se gana. Quién sabe si voy en la dirección incorrecta, y a quien creo que debería amar (en su más amplio concepto) debería odiar algo más y a quien odio (también en su amplia definición) debería querer o apreciar un poco más...
Un lío, sí lo sé, pero al fin y al cabo, es uno de esos pensamientos que te persiguen y que no sabes exactamente cómo plasmar en un papel pero que finalmente acaban siendo una amalgama de ideas sueltas pero que en cierto modo aplacan ese deseo de expulsar lo pensado...aunque no quizás exactamente cómo quisieras...Y todo esto debido a un sueño, un mal o buen sueño...ya veremos cómo definirlo...

viernes, 11 de febrero de 2011

La mecánica del corazón

Fragmentos extraídos de un libro que estoy leyendo. Lo he empezado hoy, al solecito de la sobremesa, y me ha encantado su contenido primero, pues no he avanzado más de cincuenta páginas, y sobre todo, algunos fragmentos que no puedo dejar de plasmar en éste mi rinconcito, por ser preciosas, verdaderas y llenas de sentido y significado.
"Primero, no toques las agujas de tu corazón. Segundo, domina tu cólera. Tercero y más importante, no te enamores jamás de los jamases. Si no cumples estas normas, la gran aguja del reloj de tu corazón traspasará tu piel, tus huesos se fracturarán y la mecánica del corazón se estropeará de nuevo"...
..."Pues bien, ese es un sufrimiento insignificante si lo comparas con el que puede originar el amor. Algún día, es posible que tengas que pagar un precio muy alto por todo el placer y la alegría que el amor provoca. Y cuanto más intensamente ames, más intenso será el dolor futuro. Conocerás la angustia de los celos, de la incomprensión, la sensación de rechazo y de injusticia. Sentirás el frío hasta en tus huesos, y tu sangre formará cubitos de hielo que notarás correr bajo tu piel. La mecánica de tu corazón explotará. Yo misma te instalé el reloj, conozco perfectamente los límites de su funcionamiento. Como mucho es posible que resista la intensidad del placer, pero no es lo bastante sólido para aguantar los pesares del amor"...
..."Cuando tengo mucho miedo, noto que la mecánica de mi corazón patina hasta tal punto que parezco una locomotora de vapor en el momento en que sus ruedas chirrían en una curva. Viajo sobre lo raíles de mi propio miedo. ¿Dé qué tengo miedo? De ti, en fin de mí sin ti. El vapor, pánico mecánico de mi corazón, se filtra por debajo de los raíles"... 

LA MECÁNICA DEL CORAZÓN. MATHIAS MALZIEU

miércoles, 9 de febrero de 2011

Complaciente...

Hoy me ha venido a la mente algo que pensé en compartir y después no, pero bueno, si este es mi especie de diario, compartido, creo que merecía la pena reflejar que hay veces, quizás por mi forma de actuar, que me siente demasiado complaciente para con la gente. Y me explico. Me considero una persona detallista, pero me da la sensación de que hay veces que me supero demasiado, que de tan bien que me quiero portar con alguien, o ayudar, o lo que sea que me pida el cuerpo con alguien en concreto, creo que suena a que me esfuerzo o me fuerzo para complacer a quien tengo enfrente. Y ni mucho menos, porque soy una persona a la que le gusta tener contentos a los que tienen alrededor, bien sea con un mensaje de aliento, una palabra de ánimo, un regalito, un detalle, una postal o un simple escrito, da igual, creo que muchas veces el mensaje correcto puede venir de mil maneras disfrazado, pero sí que hoy, en un momento dado, y no sé como ha llegado a mi mente, he sentido que para mucha gente, o para el resto del mundo, puedo parecer eso mismo, que intento quedar bien con todo el mundo, pero espero y confío que, quien me conoce, no tenga esa percepción que yo he tenido de mí misma, aún sabiendo que lo que hago, y con quien lo hago, y no me refiero a nada ni nadie concreto en este momento, es porque me sale, porque soy así, porque lo llevo en la genética o entre mis cualidades o defectos, cada uno supongo que lo considerará de una manera...
Pero así me he sentido este miércoles y así lo quería expresar..