Mi mejor definición, por vosotros: Diferente, buena profesional, atenta, reservada, curiosa, habladora, cordero con piel de lobo, observadora, detallista, inteligente, amiga de sus amigos, perseverante, de impresión fría y distante, generosa, audaz, terca, temperamental, tierna y entrañable bajo una capa distante y fría, divertida, cabezona, quejica, especial, cariñosa, sensata, directa, sincera, con gran corazón, de apariencia seria, humilde, comprensiva, persistente, sabe escuchar, empática, paciente, cariñosa por momentos, fuerte por fuera y débil por dentro, buena consejera, responsable, agradable, sensible, con gracejo especial, consecuente, inquieta, alegre, expresiva, alguien que sabe escucharte, emotiva, entregada, cabal, culta, con la que siempre se puede contar.



martes, 15 de marzo de 2016

Al final, fallas

Demasiadas veces vuelve esa sensación de no estar lo suficiente, de fallar...
Y es que, parece que me entrego a mi sufrimiento, a mi pena, a mis alegrías, a mi vida, a mirarme el ombligo tanto, que empiezo a dejar de prestar atención a quien merece que le preste cinco minutos del día. Solo cinco.
Siento, a todos os que os he fallado en algún momento, y a los que os seguiré fallando, comportarme así. Siento no preguntar tan a menudo como me gustaría cómo estáis; siento no estar ahí cuando me necesitáis; siento callarme mis miserias y no compartirlas, porque a pesar de que me importáis, no quiero aburriros con mis historias; siento no quedar tanto con vosotros como me gustaría, por el simple placer de compartir un café; siento no haceros partícipes de mis ideas; siento no daros la mano cuando algo os da vértigo; siento fallar...

Siento fallar; siento no darme cuenta de que hay algo más a mi alrededor; siento querer estar en tantos sitios a la vez y al final no llegar a ninguno; siento no ser lo que esperáis, porque soy la mujer más imperfecta encima de la tierra; siento parecer frívola o que no me importan vuestros problemas, porque no es así; siento ser una cobarde; siento no estar a la altura; siento no estar siempre que alguien me necesita; siento no escuchar todo lo que tenéis que decirme, siento no ser un desahogo para vosotros; siento no ser ese hombro en el que llorar o esa persona con la que reír; siento ser, al final, una desilusión...
Pero quiero que sepáis que estoy aquí. Que si alguien me necesita, alguien a quien haya fallado o abandonado, solo tiene que gritar, que estaré ahí, porque que yo sea de las que esconde sus problemas bajo la alfombra no significa que todos los hagamos, porque compartirlos es sano, mucho, y reconforta. Porque los amigos, porque las personas a las que quiero, no van a sobrar nunca y porque la gente que incorporo a mi vida, tampoco. A veces podré perderme en mis historias, pero considero que sigo siendo aquella que tanto aprende escuchando y que tanto disfruta pudiendo dar un sabio consejo. Antes que contar, prefiero escuchar y eso sigue estando...nunca dejó de ser...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Muchas gracias por acercarte a mi rincón!