Mi mejor definición, por vosotros: Diferente, buena profesional, atenta, reservada, curiosa, habladora, cordero con piel de lobo, observadora, detallista, inteligente, amiga de sus amigos, perseverante, de impresión fría y distante, generosa, audaz, terca, temperamental, tierna y entrañable bajo una capa distante y fría, divertida, cabezona, quejica, especial, cariñosa, sensata, directa, sincera, con gran corazón, de apariencia seria, humilde, comprensiva, persistente, sabe escuchar, empática, paciente, cariñosa por momentos, fuerte por fuera y débil por dentro, buena consejera, responsable, agradable, sensible, con gracejo especial, consecuente, inquieta, alegre, expresiva, alguien que sabe escucharte, emotiva, entregada, cabal, culta, con la que siempre se puede contar.



sábado, 26 de marzo de 2016

Desistir

Quizás es hora de desistir, de abandonar el estúpido intento de pensar que alguien se puede interesar por mí...
Porque cada vez que hago un intento de creer que eso es así me llevo un chasco. Y eso es lo de menos, y es que la autoestima se queda hecha añicos, las ganas de continuar luchando se agotan y la moral se te cae hasta los suelos. Y es que parece que llevo un cartel que ponga "interesados en agrietar mi autoestima, aquí", señalando directamente hacia mí. 
Siempre estoy en las mismas, una decepción me lleva a querer estar sola, a no querer ver a los hombres ni en pintura, a no confiar en ningún otro de por vida y de repente me veo con otra gran decepción encima. Sin buscarla, sin quererla, sin desearla. Y es que ha aparecido alguien de golpe, de forma inesperada, me he confiado aunque me repitiera a mi misma que iba con pies de plomo y eso no iba a pasar pero en cambio me siento con la absurda sensación de haber pecado de ingenua.


Por eso y después de muchos intentos de pasar desapercibida y no ser el centro de atención de los caprichosos castigos de los hombres, desisto. 
Sí, desisto, no me quedan fuerzas y mucho menos ganas. Dejarse la piel a veces es duro y complicado, desgasta y de te deja en estado de 'chof'...
Y si alguna vez mereciera la pena, podría tener un pequeño aliciente, pero así es directamente imposible. 
Toca rendirse, aunque confiara, después de negarme a mí misma que le interesara, en que había nacido una pequeña intención. Solo una intención. Pero no fue así, me equivoqué y no supe frenar a tiempo o darme cuenta de que todo era un paripé o una mentira. Y ahora quizás toca entender que no era mi oportunidad, que no había llegado mi momento. Como otras tantas veces. No basta con desearlo. Simplemente parece que no era. Él no era. O yo. Aunque hubiera comenzado a presagiar que sí. 
De esas veces que crees que sí pero no y no pero sí pero que hay una pequeña chispa ahí, cerca de ti. Pero no hay, así que toca alejarse, toca abandonar y desistir, porque no era para mí, quizás para otra...seguro, pero no para mí...como siempre, una vez más...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Muchas gracias por acercarte a mi rincón!