Mi mejor definición, por vosotros: Diferente, buena profesional, atenta, reservada, curiosa, habladora, cordero con piel de lobo, observadora, detallista, inteligente, amiga de sus amigos, perseverante, de impresión fría y distante, generosa, audaz, terca, temperamental, tierna y entrañable bajo una capa distante y fría, divertida, cabezona, quejica, especial, cariñosa, sensata, directa, sincera, con gran corazón, de apariencia seria, humilde, comprensiva, persistente, sabe escuchar, empática, paciente, cariñosa por momentos, fuerte por fuera y débil por dentro, buena consejera, responsable, agradable, sensible, con gracejo especial, consecuente, inquieta, alegre, expresiva, alguien que sabe escucharte, emotiva, entregada, cabal, culta, con la que siempre se puede contar.



domingo, 5 de septiembre de 2010

Mi particular homenaje, donde quieras que estés...

La vida pasa tan deprisa por delante de tus ojos que muchas veces cuesta reaccionar, y eso es lo que ha provocado esta cruel noticia en todos los que te conocíamos, desasosiego, sinrazón y pena, porque tenías una vida entera por disfrutar, por experimentar y por seguir dando más de ti. Ahora que faltas es cuando se nota tu vacío, ese que quizás no hemos sentido estos meses atrás, porque saber de ti de tu propia boca nos reconfortaba y es que tu lugar seguía ahí, esperándote, tu mesa, tu ordenador y tu silla, esperando ese momento en que superaras esa enfermedad que te asaltó sin avisar y que tuvieras ganas de seguir dando el callo en el mundo del periodismo en esta ciudad que ya te tenía como una portuense más, a pesar de tu acento y ese color blanquito tan característico de tu Badajoz natal.
Es difícil hablar cuando te embarga el sentimiento, pero creo que como yo lo hago desde ayer, los que te conocemos hemos dado marcha atrás en el tiempo y hemos comenzado a rememorar el día en que te vimos por primera vez. El mio fue hace ya seis veranos, cuando me enfrentaba por primera vez a una redacción, a unas prácticas laborales y al mundo del periodismo, y la primera impresión fue pensar que eras demasiado estricta, algo que hemos compartido muchos de los que hemos pasado por esta redacción de Información, pero sin duda, ahora también puedo decir que has sido un gran ejemplo de qué periodista ser, de intentar no faltar a la verdad, de ser estricto con uno mismo para que una noticia acabe siendo la mejor, de tenacidad, de responder cuando se nos ha necesitado y en mi caso, de cómo intentar dirigir una redacción, algo nada sencillo. Ahora, que llevo un año en tu pellejo comprendo eso que teníamos como mano dura y exigencia, y estoy convencida de que todo lo que tú transmitías es ser una periodista de los pies a la cabeza.
Periodista de esas a las que no le gustaba hablar en público o señalarse, discreta y sencilla, así es como te recordaré, y así es como muchos deberíamos pretender ser. No querías siquiera que te hicieran fotos, por eso nuestro recuerdo se basará aún más en eso, en recuerdos.
Y como persona siempre has sido un misterio, pero compartir seis años contigo ha dado para mucho, para conocer tus manías o tu reserva ante los temas personales. Y al fin y al cabo, nos guste o no, hemos compartido muchos momentos, de tensión laboral, de alegría personal, de complicidad, o el castigo de los reseves de la vida personal, ese mismo que ahora nos da el caprichoso destino con esta noticia.
Hoy todos somos uno, no tenemos nombre, ni apellidos, ni somos de un medio o de otro, hoy no hay rivalidad, sino compañerismo, y todos, estemos más cerca o más lejos, abrazamos el recuerdo que tenemos de ti.
A los que nos quedamos, a los que nos faltas, la resignación es lo que nos queda, pero no podemos ocultarla, porque ya estamos cansados de que esa maldita enfermedad nos robe a compañeros, amigos, hermanos, tíos, hijos, etc...No podemos luchar con nuestras palabras, locuciones, intervenciones o comunicados de prensa contra ella, pero sí que en mi caso espero que la palabra sirva para que, estés donde estés, te lleves un cálido recuerdo de los que te queremos, los que te añoraremos, aunque no lo hayamos dicho cuando debíamos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Muchas gracias por acercarte a mi rincón!