Mi mejor definición, por vosotros: Diferente, buena profesional, atenta, reservada, curiosa, habladora, cordero con piel de lobo, observadora, detallista, inteligente, amiga de sus amigos, perseverante, de impresión fría y distante, generosa, audaz, terca, temperamental, tierna y entrañable bajo una capa distante y fría, divertida, cabezona, quejica, especial, cariñosa, sensata, directa, sincera, con gran corazón, de apariencia seria, humilde, comprensiva, persistente, sabe escuchar, empática, paciente, cariñosa por momentos, fuerte por fuera y débil por dentro, buena consejera, responsable, agradable, sensible, con gracejo especial, consecuente, inquieta, alegre, expresiva, alguien que sabe escucharte, emotiva, entregada, cabal, culta, con la que siempre se puede contar.



sábado, 11 de septiembre de 2010

Un centenario teñido de amarillo y azul


Son muchas las sensaciones que pasan por la cabeza de un cadista en una fecha señalada como es el 10 de septiembre de 2010 y su entorno, pues el equipo de la capital gaditana lleva un año de celebración de su centenario. Sin duda, es una pena que sea precisamente este año, cuando el Cádiz tendría que estar más alto, esté lo más bajo que soñaría la afición. No sabría decir en qué momento comencé a tener conciencia de que ese equipo, estuviera en la categoría que estuviera, me gustaba, admiraba a esos jugadores que entonces se dejaban la piel en el césped por dar gloria a una afición que se desvivía cada fin de semana por su equipo. Pero sin duda, hay que remontarse mucho en el tiempo para llegar a ese momento, y entonces, puedo decir y repetir que no era precisamente en Primera donde militaba el Cádiz.
Han sido muchos años de sufrimientos y de alegrías, de lágrimas en los ojos por un buen resultado o por un castigo más, y este 2010 no ha podido ser, no llegaron los buenos resultados y el momento parece que no era el idóneo para celebrar, que no se cumplen todos los días, los cien esperados años. Pero la afición no castiga, y ahí seguimos, empeñados en que el equipo amarillo esta liga sí pueda salir victorioso y airoso, es decir, que suba por lo menos a Segunda, pues Primera queda lejos y hay que hacer muchos esfuerzos que quizás en época de crisis no pasa por los planes de los de arriba. Pero también hay que aclarar ya quién lleva el timón, quien se pone al frente y que los jugadores se crean ya que pueden hacer frente a aquellos que visitan el fuerte de Carranza y cuando se viaja a otros lares. Y a la afición no se le puede pedir más, es fiel, sueña con mejores tardes, con resultados abultados, con grandes goles y con cambios en la suerte, pues parece que un ascenso, como el vivido hace unos años, no puede ir seguido tan pronto de un descenso, de un bajonazo, como se diría en el Carnaval, de un cajonazo tan radical, principalmente porque esta entidad no lo merece, pero mucho mejor, porque aquellos que tienen todo el año su corazón pintado de azul y amarillo y que se desviven por este club no merecen estar donde están. Y por qué no, terminar ya el emporio gaditano, aquel al que le falta su tribuna, una de sus murallas.
Lo importante, aunque el optimismo tiene que ir siempre por delante, es seguir manteniéndose, sea en una u otra categoría y aunque éste no sea el mejor año para celebrar nada, hay que celebrarlo, disfrutar de esos cien años de historia, de risas y llantos en un estadio que ha ido cambiando como lo ha hecho su equipo, por el que han pasado grandes figuras reconocidas por la Historia, caras que irán ligadas al Cádiz por siempre. Los cadistas deben seguir empujando a los cadistas, animarlos a seguir siendo de este club, porque principalmente deben preponderar sus dos colores en el sentimiento de la ciudadanía. Pero nadie debe olvidarse de que lo mejor que tiene este Cádiz, los anteriores y los futuros, son sin duda todos aquellos anónimos que siempre tienen una palabra de aliento para el equipo.
Y es que, el Cádiz, el club, lleva en su sangre y en historia la historia de la ciudad que le dio vida. Han sido más de 3.000 años de lucha, de pérdidas y de victorias, de demostrar al mundo quién era Gades, Gadir, Cádiz, la Tacita de Plata. Pues lo mismo tiene que hacer este equipo, esta afición...Aún queda mucho camino por recorrer...y mucho que demostrar..pero para ello hay empeño y más..
No quiero que se me olvide, yo tengo que dar gracias a una persona que ha sido muy importante para mí, por lo que ha significado en mi vida, que fue la que me dio a conocer a este equipo, quien me dio la oportunidad de disfrutar de cada uno de los momentos históricos de este equipo, a remontar los disgustos y a celebrar cada alegría como si fuera la última.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Muchas gracias por acercarte a mi rincón!